Polytoxus siculus |
La singularidad de esta especie es que no se alimenta de vegetales - como la mayoría de chinches - sino que es cazadora de pequeños insectos, por lo que ocupa un lugar destacado dentro de la cadena trófica como depredadora. El único registro que consta de su presencia en la Península Ibérica data de 1960, precisamente también en el Delta del Llobregat. Desde entonces, debido a la ausencia de nuevos registros, se aceptaba que la especie había desaparecido.
Los otros dos insectos encontrados de nuevo son un escarabajo (Stenostoma rostratum) y un saltamontes (Heteracris littoralis), que también se daban por desaparecidos. No obstante, hay que tener en cuenta que las tres especies halladas “son muy escasas”, como advierte Xavier Santaeufemia, biólogo de la reserva natural. “La verdad es que los espacios naturales del Delta del Llobregat han sufrido una gran transformación en estos últimos años que ha provocado la desaparición de hábitats donde vivían estos animales”, añade.
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